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Los fundamentos del Diseño Ético

17.08.2023

¿Cómo definimos qué es importante a la hora de considerar un diseño como ético? ¿Qué prácticas podemos seguir para garantizar que los productos en los que nos involucramos respeten los principios del Diseño Ético?  La importancia de los equipos de diseño en la creación de productos que sean buenos para los usuarios, buenos para los negocios y buenos para la sociedad.

Cada día son más las actividades de la vida cotidiana que tienen lugar en el mundo digital. Y con ese fenómeno, las aplicaciones y sitios web se enfrentan a evaluaciones más informadas por parte de las personas usuarias, especialmente sobre los aspectos morales y normativos que son contemplados en su desarrollo. Las inquietudes son varias, y abarcan experiencias de compra, banca, citas o incluso aprendizaje en línea. En general las preocupaciones apuntan a la falta de abordaje integral de las necesidades de todas las personas usuarias, con sesgos intencionales o no, y alertas en algunos casos sobre prácticas abusivas por parte de las compañías. 

Los productos digitales han llegado al punto en que son inseparables de nuestras vidas, por lo que es necesaria una consciencia activa en los equipos de diseño, ya que las experiencias digitales tienen un efecto real y tangible en la vida de las personas que las usan. La ética en el diseño no es una novedad, es de hecho una conversación que data desde antes de la era digital, pero nunca ha sido tan relevante como hoy, con el avance de la IA, la realidad aumentada, el internet de las cosas y la hiper personalización.

Los equipos de diseño son parte fundamental en el proceso que da forma a los sistemas o interfaces, y por eso están en una posición central para cambiar las bases de las experiencias de usuario y hacerlas más éticas, conscientes y seguras.

Jerarquía ética de necesidades

Cuando hablamos de conceptos como la ética, es difícil expresarlos en escalas que cuantifiquen el cumplimiento de los productos al momento de evaluarlos. Pero tomando a la ética como un sistema de principios morales que definen lo que se percibe como bueno y malo, podemos llegar a considerar diseños éticos a los que son creados con intenciones de hacer el bien, en contraste con aquellos que son diseñados con prácticas de sombrero negro.

Un enfoque que nos puede guiar para establecer si un producto o experiencia digital responde a las necesidades de las personas usuarias sin dañarlas es la pirámide de la “Jerarquía ética de necesidades” desarrollada por Aral Balkan y Laura Kalbag de ind.ie, una organización sin fines de lucro que lucha por la justicia social en la era digital.

jerarquía ética de necesidades

La ‘Jerarquía ética de necesidades’ (con licencia CC BY 4.0 ) (Fuente: ind.ie )

Allí se grafica el núcleo de características que definen al Diseño Ético, y que debemos contemplar para garantizar experiencias éticas.

En esta jerarquía, como en toda estructura de pirámide,  cada nivel descansa sobre las capas que están debajo. Por lo tanto, si alguna se rompe, las que están por encima colapsan. 

En la base de la pirámide, y por lo tanto la parte fundamental a revisar para garantizar productos diseñados éticamente, Balkan y Kalbag consideran que “la tecnología que respeta los derechos humanos es descentralizada, de igual a igual, con protocolo de conocimiento cero, cifrada de extremo a extremo, gratuita y de código abierto, interoperable, accesible y sostenible. Respeta y protege las libertades civiles, reduce la desigualdad y beneficia la democracia.”

En el segundo nivel, enuncian que “la tecnología que respeta el esfuerzo humano es funcional, conveniente y confiable. Es atenta y complaciente; no arrogante ni exigente. Entiende que podrías estar distraído o tener capacidades diferentes. Respeta el tiempo limitado que tienes en este planeta.”

Por último, el nivel superior define que “La tecnología que respeta la experiencia humana es hermosa, mágica y agradable. Simplemente funciona. Es intuitiva. Es invisible. Pasa a un segundo plano de tu vida. Te da alegría. Te otorga superpoderes. Te pone una sonrisa en la cara y mejora tu vida.”

Si un diseño no respalda los derechos humanos, no es ético. Si apoya los derechos humanos pero no respeta el esfuerzo humano al ser funcional, conveniente y confiable, no es ético. Si respeta el esfuerzo humano pero no respeta la experiencia humana al mejorar la vida de las personas que lo utilizan, entonces sigue siendo poco ético.

Traducido a la práctica, podemos decir que los productos y servicios que explotan los datos de los usuarios, utilizan patrones oscuros y, en general, solo buscan ganar dinero, sin tener en cuenta su propósito humano, no son éticos.

Principios del Diseño Ético

Más allá de la evaluación que podemos hacer sobre las experiencias digitales y sus propósitos, ¿qué prácticas podemos incorporar para asegurarnos de que estamos aplicando los principios del Diseño Ético? Revisemos algunos principios básicos que podemos seguir para satisfacer las necesidades de las personas usuarias y asegurarnos de velar por su bienestar.

Usabilidad

Si bien la usabilidad ya es un requisito básico de todo diseño, nunca hay que dejar de revisar y actualizar las nociones que tenemos para cumplir este aspecto. 

Partamos de la base de que un producto no usable es considerado una falla de diseño. El diseño debe ayudar a la persona usuaria a alcanzar lo que quiere, cumpliendo sus necesidades, siendo fácil y placentero de usar. Jakob Nielsen define cinco componentes clave de la usabilidad:

  • Capacidad de aprendizaje: ¿Qué tan fácil es para las personas usuarias que se acercan por primera vez?
  • Eficiencia: ¿Qué tan rápido puede la persona usuaria completar la tarea que busca realizar?
  • Memorabilidad: ¿Qué hace que las personas usuarias regresen?
  • Errores: ¿Cuántos errores se cometen en su uso y qué tan graves son?
  • Satisfacción: ¿Qué tan placentero es el uso del diseño?

Generalmente, la usabilidad debe ser invisible. El buen diseño es perfecto, mientras que el mal diseño se hará ver y sentir inmediatamente. Los diseñadores tienen la obligación moral de crear productos usables, intuitivos y seguros. Esto se logra con entrevistas exhaustivas con los usuarios y pruebas de usabilidad. Para eso es importante una interacción cara a cara con los usuarios para conocer de primera mano qué tan bien una pieza de diseño satisface sus necesidades.

Accesibilidad

La accesibilidad es un factor clave que debe estar contemplado desde el momento cero del desarrollo de cualquier producto o servicio. Los productos son diseñados para un cliente objetivo siempre, pero igualmente hay que detenerse a pensar quien puede quedar excluido de la experiencia, intencionalmente o no. Este concepto adquiere gran relevancia porque adapta las experiencias a personas con distintas discapacidades. 

Es importante garantizar que todas las personas puedan utilizar un producto o servicio sin tener en cuenta las posibles deficiencias o discapacidades que puedan sufrir. También debemos considerar una amplia gama de personas, incluidas personas con discapacidades visuales, motoras, auditivas, del habla o cognitivas.

Necesitamos tener en cuenta que alrededor del 15% de la población mundial sufre alguna discapacidad. Es justo suponer que este porcentaje también se traduce aproximadamente en su base de usuarios. A pesar de esta cifra, un estudio realizado por WebAIM sugiere que la mayoría de los sitios web no ofrecen una experiencia totalmente accesible. 

 Por eso, asegurarse de que todos puedan utilizar cómodamente el producto diseñado, tiene un valor tanto pragmático como ético.

Privacidad

La protección de la privacidad responde al primer nivel de la pirámide de jerarquía de necesidades éticas, pero puede elevar los niveles de confianza para mejorar la experiencia al nivel de deleite. 

Adquiere gran relevancia, sobre todo cuando es un tema que se reclama constantemente a los gigantes tecnológicos que han tenido que responder cada vez más a polémicas por el uso de datos personales, llevando a leyes como el reglamento general de protección de datos (GDPR) en Europa.

Desde el diseño, se puede promover la protección de la privacidad de los usuarios proponiendo elementos de diseño que informen a las personas y permitan modificar y eliminar el uso de datos sencillamente. 

Transparencia

Una de las mejores prácticas para garantizar un diseño ético es la transparencia, ya que permite a los usuarios tomar decisiones informadas. El mayor obstáculo para alcanzar la transparencia en el diseño son los patrones oscuros, que son prácticas de diseño de sombrero negro diseñados específicamente para engañarnos para que hagamos algo que no necesariamente queremos hacer.

Para combatirlos, hay que proporcionar de forma clara la información, para que los usuarios opten cuando dan o no su consentimiento.

Inclusión

A simple vista se puede pensar que los productos que diseñamos son inclusivos, pero siempre es necesario someterlos a evaluaciones que incluyan una diversidad de perspectivas. Todas las personas tienen prejuicios implícitos aún cuando nos aseguramos de tener estos conceptos en cuenta, por eso es imprescindible evitar sesgos para crear experiencias que contemplen las necesidades de todas las personas usuarias.

Productos que incluyen algoritmos, asistentes de voz o simplemente íconos y avatares, pueden estar sujetos a sesgos que excluyen y entorpecen la experiencia de diversas personas usuarias.

Sostenibilidad

La sostenibilidad es un concepto ligado a movimientos como el “Diseño para el bien”, que refieren a la capacidad del diseño para la resolución creativa de problemas y las prioridades de desarrollo internacional.

 Colocar los valores humanos de la empatía y la colaboración en el centro de los procesos de diseño destinados a encontrar soluciones innovadoras y locales a los problemas globales de desarrollo sostenible es lo que hace de esta una aplicación particularmente interesante del diseño ético, con un enfoque aplicado en el diseño centrado en el ser humano.

Aplicaciones del Diseño Ético

La aplicación del Diseño Ético en la Experiencia del Usuario es esencial para crear productos y servicios digitales que respeten y beneficien a todas las personas que las utilizan, de manera justa y equitativa. Se debe garantizar que la interacción con una interfaz digital sea positiva, respete la privacidad, sea inclusiva y no cause ningún daño. Veamos algunos casos en los que es sumamente necesaria una mirada ética en el diseño de experiencias:

Redes Sociales y Adicción Digital

Las plataformas de redes sociales a menudo emplean técnicas de diseño persuasivas para mantener a los usuarios dentro de sus plataformas, aún a costa de riesgos en la salud. El diseño ético aquí podría implicar la incorporación de recordatorios del tiempo de pantalla, permitir a los usuarios controlar la frecuencia de las notificaciones y proporcionar recursos para combatir la adicción digital.

Inteligencia Artificial y Sesgo Algorítmico

 Los algoritmos pueden reflejar los prejuicios implícitos de sus creadores y datos de entrenamiento. El diseño ético en este contexto implica una auditoría constante de los algoritmos para identificar y corregir sesgos, así como explicar cómo se toman las decisiones basadas en algoritmos.

Cuidado de la Salud Digital

Las aplicaciones y dispositivos de salud digital deben garantizar la privacidad de los datos médicos y brindar información precisa. El diseño ético aquí podría enfocarse en la seguridad de los datos, la usabilidad para diferentes grupos demográficos y la validación científica.

Educación en Línea

 La educación digital debe ser accesible y equitativa. El diseño ético podría incluir opciones de accesibilidad para personas con discapacidades, limitar la recopilación de datos personales de los estudiantes y garantizar la validez de los contenidos educativos.

Diseñar para el bienestar

Ya se trate de patrones de diseño que explotan vulnerabilidades psicológicas y fomentan sentimientos negativos de ansiedad social, soledad y aburrimiento, diseños basados ​​en patrones oscuros que inducen al error a las personas usuarias, comportándose en contra de sus necesidades e intereses, o productos y servicios digitales que están diseñados específicamente para mejorar sus propiedades narcóticas, el espacio digital suele mostrar un peligroso descuido por nuestro bienestar como personas usuarias.

Navegar por esta área de Diseño Ético también puede ser difícil si las organizaciones explotan patrones de diseño poco saludables en nombre de las ganancias. Pero para derribar ese argumento, podemos señalar que el valor de una experiencia de usuario honesta es en realidad una ventaja competitiva.

En teoría, el Diseño Ético debería ser un requisito mínimo, pero por alguna razón, termina siendo la excepción del buen diseño. Los especialistas y diseñadores de UX, tienen la responsabilidad de adoptar prácticas de diseño moralmente sólidas para el bien propio, para las personas usuarias y para el medio ambiente en general.

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